Para ser un buen periodista no solo es importante el estudio; sino fundamentalmente su compromiso con la verdad, su ética y su decisión de informar con seriedad y suma responsabilidad, y jamás dejarse manipular por cuestiones económicas o desde el poder.
Si esto sucediera es preferible no tener trabajo y generarlo en forma independiente que depender de un medio de comunicación desde el cual se quiera condicionar la labor del periodista.
Desde que elegí esta hermosa labor sabía lo difícil que es y cómo debo generarme el respecto del ciudadano y eso es posible porque aplicó en mi vida los valores que me pertenecen y los que un día me brindo en sus enseñanzas uno de mis profesores, Rafael Rueda en mi capacitación como periodista.
Espero de corazón que nuestra comprometida labor como comunicadores sociales sea siempre una herramienta útil al servicio de la democracia.
Columna de opinión por ser el 7 de junio el día del periodista por Néstor Omar Salgado.
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